Sin embargo, lo que debió parecer una gran oportunidad al principio pronto se convirtió en el hecho que marcaría la disolución de la banda. En el mes de junio de 1971 el director del musical «Hair» les vió actuar en un club de Estocolmo y les ofreció participar en la obra, pero no como banda, sino como intérpretes individuales. Con el tiempo aquel trabajo provocó que cada uno de ellos quisiera continuar por derroteros diferentes y decidieron abandonar Life.
Sin contar los bonus tracks incluidos en ediciones posteriores, el disco son casi cincuenta minutos, de los cuales más de la mitad corresponden a medios tiempos y baladas, lo que puede llegar a empalagar un poco. Aún así, hay que reconocer el buen trabajo que hacían con temas como «She Walks Across The Room» y «Every Man». Pero cuando la cosa se pone realmente interesante es con «Salling In The Sunshine», mucho más pesada y con un aire a lo Black Sabbath; «Living Is Loving», muy en la línea de Leafhound; y «One Of Us», que escarba aún más que las anteriores en la psicodelia.
Life no es un disco absolutamente redondo, pero tiene momentos inspirados y es una buena muestra de lo que se cocía en Suecia en aquellos primeros setenta. Además, nos han dejado una de las mejores anécdotas de encuentros entre músicos, que sucedió durante una de sus actuaciones como teloneros de Deep Purple, en el pub Tudor Arms. Richie Blackmore se dirigió a Anders Nordh y le dijo …œtú debes ser el guitarrista principal, ¿verdad?…, a lo que éste le respondió …œÂ¡sí! ¿Cómo lo has sabido?…. Y la respuesta vino de Ian Gillian: …œel guitarrista principal es siempre el gilipollas del grupo….
https://www.youtube.com/watch?v=xDjWT97Jw4c