Yard Act – The Overload (2022)

Un grupo de que aparece de la nada, ¿con dos años de vida y que ya está confirmado para el Coachella? Todas las alarmas sonaron, pero fue escuchar el disco y entender el por qué. El cuarteto de Leeds realmente no nace por generación espontánea, en sus filas encontramos a gente curtida como Ryan Needham de Menace Beach y James Smith de nuestros queridos Post War Glamour Girls. Ambos se conocieron compartiendo piso en 2019 y juntos sentaron las bases de la banda, hasta que con tres conciertos a sus espaldas llegó la pandemia. Lejos de tirar la toalla, montaron su propio sello con el que sacaron varios singles hasta que enamoraron a Island Records.

En pleno apogeo del post punk post Brexit, Yard Act ya cuenta a Elton John entre sus fans y han conseguido hacerse un espacio basándose en la moderación. Son políticos, pero no son tan macarras como Idles. Juegan con la electrónica, pero no dependen tanto de ella como Sleaford Mods. Y son tan eclécticos e ingeniosos como Talking Heads, acercándose a otros estilos como el funk y el hip hop. Aunque su mejor baza son las letras, ingeniosas, ácidas y divertidas como solo saben hacer los ingleses. James Smith recoge el testigo lírico de John Cooper Clarke, Jarvis Cocker o Kae Tempest, y desde su ventana indiscreta va relatando lo que le preocupa: el capitalismo, la gentrificación, la desinformación y la deriva ridícula a la que en general vamos de cabeza.