Wax Idols – American Tragic (2015)

Hacía tiempo que no escuchaba un disco como «American tragic» y no hablo de su calidad, que la tiene, sino de su sonoridad. Cuando más de la mitad de los temas de un disco te enganchan, por muy desentrenados que tengas los oídos, lo único que queda es rendirse ante la evidencia.

El año pasado profetizamos el renacimiento del post punk y, a la espera del nuevo disco de Savages, parece que nos equivocamos y que todavía queda bastanta psicodelia por barrer. De post punk y sobre todo de new wave sabe un rato largo la cantante y multinstrumentista Hether Fortune, el cerebro y el corazón detrás de Wax Idols. Un personaje fascinante que se ha curtido en la Bay Area y que, con este grupo, ha tenido la oportunidad de alejarse de las referencias hardcore que la llevaron a tocar el bajo durante los dos últimos años junto a los canadienses White Lung y, anteriormente, en Hunx & His Punx. Ahora, afincada en la ciudad de los ángeles, se ha guisado ella solita este tercer trabajo con la ayuda de Rachel Travers a la batería.

Los últimos años han pasado factura a la cantante, que ha vivido momentos muy duros fruto de una mala relación y consecuente divorcio. El hecho de que fuera dominatrix en el pasado no la ha hecho inmune al dolor y todo eso se palpa en «American Tragic», un ejercicio de superación en forma de pop ochentero oscuro y de electrónica industrialoide, lleno de odas a la pérdida y al desamor, rebosando sentimiento dentro de una frialdad que en directo se torna carisma, como hemos podido comprobar en un par de recientes actuaciones en New York. Una de ellas juntos a No Devotion, el nuevo grupo de Geoff Rickly, cantante de Thursday y propietario de Collect Records, el sello al que ahora pertenecen Wax Idols y que fue financiado breve y anecdóticamente por el capullo que infló los precios del Daraprim.

Pero no hay bien que por mal no venga y, qué mejor ejemplo que este disco de cristalina producción pero sólido como una roca, repleto de temazos como «Lonely you», «Goodbye baby», «Severely yours», «Seraph» o «At any moment» (inusualmente alegre, tanto que recuerda a Haim).