The Limiñanas – Malamore (2016)

Cómo debe molar ser francés, pronunciar las erres de esa manera que las pronuncian ellos (que parece que tengan una magdalena proustiana atragantada en el gaznate), y tener un dúo musical ultramolón de rock sofisticado y elegantón. Bah, en realidad ser francés debe ser una ful, pero como The Limiñanas son de Perpignan, y como desde tiempos inmemoriales me han dicho desde TV3, Perpignan es …œla Catalunya Nord…. Así que no cuentan como gabachos, aunque ese sea el idioma escogido para cantar sus canciones, siempre oscuritas, indulgentes y francamente sensuales.

Poco ha cambiado el universo sonoro de Marie (la baterista) y Lionel (quien se encarga de la guitarra, órgano, bajo…¦ Vamos, de todo lo que no sea darle al tambor) desde que empezaron a publicar singles en 2009. Su sonido bebe del Gainsbourg más macarra, del pop más vaporoso y psicodélico y del rock viciosón de la escuela Velvetiana. Y, claro, con esas tres coordenadas -simples y efectivas- y con bastante gracia, The Limiñanas son clara y llanamente uno de los combos más interesantes surgidos del país vecino.

Su nuevo trabajo, …œMalamore…, incide y reincide en lo expuesto anteriormente (tanto en sus discos como en esta reseña), añadiendo en esta ocasión elementos acústicos, bailables y arty roquistas, para conformar un disco que, pese a lo …œlimitado… de su propuesta sonora, que posiblemente en entregas anteriores llegaba a cansar un poco (pero poco), brilla con luz propia y los posiciona como uno de los grupos a sacar en las conversaciones en las que gana el que conoce a grupos más raros. Ah, y en él colaboran Pascal Comelade y Peter Hook (ex New Order, ex Joy Division, ex amigo de Bernard Summer), pero vamos, que su presencia ni suma ni resta pero ahí están y dicho queda.