Sleep Token – Take Me Back To Eden (2023)

Sabía (o pensaba) que hacían metal y que iban enmascarados, eso era lo único que conocía de ellos. Tampoco sabía que «Take Me Back To Eden» era el capítulo final de una trilogía que abrieron con «Sundwoning» (2019) y «This Place Will Become Your Tomb» (2021). Ahondando un poco en su lore, descubro que dicen ser los representantes mortales de una deidad llamada Sleep, que no dan entrevistas y sus identidades se desconocen como inicialmente pasó con Ghost o Slipknot. Lo que no me esperaba es que este cuarteto de Londres se atreviera a mezclar elementos del R&B con guitarras más propias del djent o el metalcore en temas progresivos hasta la médula.

Puedo entender que Sleep Token genere opiniones encontradas. Que los ames o los odies. Pero como hijo adoptivo de los 90, apoyo los crossovers entre estilos que aparentemente no tienen nada que ver. Incluso bandas más recientes como Zeal & Ardor o Sun me han conquistado gracias a sus mezclas imposibles. Obviamente se trata de una jugada muy bien ensayada, con una gran producción detrás y hasta un cierto punto artificial, pero que a juzgar por sus ventas y sus millones de reproducciones les está saliendo a la perfección. Su imagen impactante y la gran capacidad vocal de Vessel (adornada sutil y puntualmente por el autotune), unido a las guitarras aplastantes y los teclados de corte clásico funciona sorprendentemente bien en mi opinión. Si quieres probar cosas nuevas, ésta desde luego no te dejará indiferente.