Kid Kapichi – There Goes The Neighbourhood (2024)

El cuarteto de Hastings van casi a disco por año y no parecen haber perdido un ápice de energía desde aquel «This Time Next Year» (2021) que nos conquistó a primera escucha. Siguen con su post punk bailable y reivindicativo, metiendo el dedo en el ojo del establishment británico.

En canciones como «Artillery», «Get Down», «999», o «Can EU Hear Me?» emplean su habitual lengua afilada y letras ácidas para atacar temas como el coste de la vida, cada vez más alto mientras otros hacen ostentación de su riqueza. Critican a una clase política incompetente y corrupta que nos lleva al abismo, y lapidan el Brexit (aunque mucho me temo que Kid Kapichi ya estaban cabreados antes de su salida de Europa).

En «Tamagotchi» recuerdan aquellos años donde todo era más fácil y no había preocupaciones porque básicamente éramos niños, un pensamiento recurrente en muchos de los punks que he conocido en mi vida. Además han conseguido una cosa que no debe de ser nada fácil y dice mucho de ellos, la colaboración de Suggs de Madness en «Zombie Nation», que se los lleva a su terreno para visibilizar una sociedad inánime incapaz de levantarse para defender sus derechos.

Pero no todo el contenido de «There Goes The Neighbourhood» está cargado políticamente y aquí está la novedad. «Angeline» habla sobre un amor tóxico del que no te puedes despegar y la acústica «Jimi» es un melancólico homenaje a un amigo de la infancia fallecido.

En definitiva, un trabajo más o menos continuista, que no sorprende pero entretiene como el primer día. Seguimos apostando fuerte por ellos, no podría ser de otra manera.