Failure – The Heart Is a Monster (2015)

Hay reuniones y reuniones, unas son completamente innecesarias y otras son tas arriesgadas como gratificantes. Si hace unas semanas os hablábamos de Faith No More, hoy toca hacerlo sobre una banda que con la que probablemente muchos no estéis familiarizados pero que han servido de referente para muchos de nuestros artistas favoritos de las últimas décadas.

Los angelinos Failure siempre tuvieron la fortuna de gozar de plena libertad a la hora de componer sus discos, quizás porque nunca sintieron la presión de las listas de éxitos ni de ninguna discográfica importante, pero fue sobre todo gracias a su integridad, su original sonido y ética laboral que el tiempo los ha situado como grupo de referencia de muchas otras bandas como, por ejemplo, A Perfect Circle que llegaron a versionar el tema «The Nurse Who Loved Me».

Preparaos para viajar en el tiempo 20 años y presenciar la evolución natural de «Fantastic Planet», el álbum que compartía título con la psicotrópica película de René Laloux. Un trabajo continuista no solo por los tres interludios que precedían a los de este disco, sino porque para el grupo no parecen haber pasado los años y, si «The Heart Is a Monster» no suena como un disco de 1997 es por el bagaje adquirido por Ken Andrews como productor a lo largo de los últimos años. Como pasa con sus amigos de Tool, nada en esta banda pasa por casualidad y la magia entre Edwards y Andrews sigue impermeable al tiempo, las aportaciones del recuperado Kellii Scott y Troy Van Leeuwen (colaborando a la guitarra en cuatro de los temas) han dado como resultado un ente de space-art-rock psicodélico para disfrutar con calma cual cerveza de doble malta, donde las oníricas melodías se subliman al entrar en contacto con la solidez noventera de sus instrumentos.

Failure nunca han buscado el single fácil, vienen de la época en lo que realmente hacía grandes a las bandas eran los discos, aunque sí nos han dejado perlas en cada uno de sus obras y este no es ninguna excepción gracias a excelentes temas que basculan entre la sensibilidad pop de «Mulholland Dr.» y la contundecia de «Hot Traveler» o «Atom City Queen» (¡vaya bajo!)