El extraño nombre de la banda procede, según el propio Rod, de acortar John Doe, que en Estados Unidos se usa para referirse a las personas desconocidas. Parece que tuvieron la magnífica foto de la portada primero y a raíz de ahí surgió el nombre. Tan sólo estuvieron un par de años juntos y ni siquiera empezaron la composición de un segundo trabajo, pero en ese tiempo les dio tiempo a grabar «Guts» y hacer una pequeña gira.
«Guts» consigue en apenas 45 minutos configurar un perfecto catálogo de canciones de blues rock en la línea de Cream y similares. Si con el comienzo de «Nightmare» ya vemos por dónde va el asunto, con ese riff arenoso, más adelante con «One Night Sand» y «What…™s Your Number» comprobamos como estos tipos bien podrían haberse alzado con el título de dignos herederos de Hendrix. Pero en medio de todo esto también nos encontramos con «Rat Race», un potencial single con un estribillo sumamente pegadizo. «Wish You’d Never Been Born» nos devuelve la rudeza de la guitarra de Alexander después de la más pausada «Seventeen» y «There…™s Still Time» conjuga el blues rock con un estribillo casi góspel.
Es muy interesante que, para una banda tan desconocida, encontremos entre los créditos nombres como Martin Birch (Black Sabbath y Deep Purple, entre muchos otros) y el del productor Derek Lawrence (Deep Purple, Green Bullfrog, etc.). La explicación es que Rod Alexander había conocido a Ritchie Blackmore, que asistió a un ensayo de la formación y les recomendó a Lawrence, quien se encargó de conseguirles un contrato con Decca. Lástima que ni el sello ni Blackmore prestasen más atención a la banda después de este trabajo.