Biscuit – Biscuit (2016)

Directo a barraca, jugando siempre al toque y en vertical, sin dar pases horizontales como el Valencia de Parreira (cómo aburría verlos jugar, mecagoen), sin entretenerse en florituras innecesarias y buscando el gol hasta el minuto 90. Así es el nuevo disco, …œS/T…, de los catalanes Biscuit, uno de los conjuntos más veteranos del rock (o power pop, pero del muy ruidoso) hecho en nuestra tierra. Unos santos varones estos mozos. Pasan los años y a pesar de lo chungo que es mantener la ilusión en un país como el nuestro si te dedicas al rock, esta gente sigue manteniendo la llama encendida y las ganas intactas. Bien por ellos.

Lejos de haberse apuretado y dedicarse al folk soporífero a lo americana, los Biscuit han tirado por el camino de en medio y nos presentan un trabajo furioso, intenso y poderoso a más no poder. Recogiendo las enseñanzas de los popes del rock más clásico y del pub rock cervecero, Biscuit han sabido hacerse un hueco en el corazón de los amigos de lo verdadero. Aquí no hay impostaciones chabacanas ni ganas de gustar a los que nunca les ha interesado lo suyo. En …œS/T… sobretodo encontramos canciones crudas y roquistas hechas con el mimo del que sabe que esto de la música no es ni una moda ni una pasión pasajera. Y por eso será que este disco suena tan bien.