Free Fall – Power & Volume (2013)

Por lo general, cuando doy el término de música de la vieja escuela pienso en los años 60 y 70. Con el éxito de bandas como Rival Sons o Kadavar, hay un verdadero regreso a los años 70. Un regreso que también es paralelo a la de los de la vieja escuela del metal de los 80. ¿Cómo podemos explicar todo esto? Simplemente hay tendencias que indican un deseo de volver a lo básico para los seres humanos. Solo hay que ver hoy la moda de cualquier cosa y el número de jóvenes artistas emergentes con esta filosofía. Y al igual que cualquier otro modo o cultura musical en este caso, el exceso de mismos sonidos y la falta de originalidad que nos abunda, pueden hacernos algunas veces a morir del más exasperante aburrimiento. Sin embargo, el grupo sueco es perfectamente lo contrapuesto y aunque realizan un sonido de lo más familiar (digamos que no son los más originales), en cambio su música suena a salvación. Este es el caso de Free Fall, cuyo álbum debut «Power & Volume» es una sorpresa muy agradable con un rock de lo más feroz, maravilloso y a veces oscuro. A medida que las influencias son definitivamente buscadas en los años 70 como ya vemos a lo largo y tendido del álbum, contiene una gran personalidad en la composición. Este es supongo es el discurso de Mattias Bärjed y sus secuaces, guitarrista que comenzó su carrera musical hace ya casi 20 años y en los que ha tocado con Soundtrack Of Our lives, ha producido discos a The Hellacopters. ¿A quién no le gustaría «vivir en otros tiempos y en otros momentos ahora»? Ellos toman prestado toda esa forma de pensar acerca de la música, tal vez más «auténtica» y «libre» de lo que el formato y los métodos de producción modernos nos tienen acostumbrados en los últimos años. De ahí la etiqueta de «Freedom Rock» que la banda le gusta auto dominarse heredado del pasado, pero eso no les impide seguir adelante.

El grupo sueco es retro, vintage y todo lo relacionado con pantalones de campana y camisas ajustadas. Todo en Free Fall está al alcance desde The Rolling Stones, AC/DC, Van Halen… Directamente y sin conjeturas las guitarras escupen bilis y rabia instalas en atmósferas espeluznantes y amenazantes, la mezcla de todo es muy… Particular e increíble. Aunque parecen de otro tiempo, tenemos que admitir que el sonido también tiene su encanto y es contagioso. El nivel de la música que reflejan realmente se caracteriza por ser auténtica o progresiva. Canciones enérgicas, rápidas y venenosas como serpientes de cascabel («Power & Volume…, «Top of the World»), junto con otras canciones con tendencias más pesadas que se encuentran en («Midnight Vultures», «Atila», «Damnation») . La secuencia de las canciones y el equilibrio está perfectamente bien administrado en todo el álbum, siempre va bien que después de un par de canciones cañeras nos den un poco de descanso (aunque aquí la tregua es mínima) para que nuestros tímpanos no nos revienten. La mayoría de los temas por no decir todos van a lo esencial sin dar rodeos, directos si más, por lo que para mí es de agradecer.

Si has llegado al punto en que la música de hoy te suena a poco y quieres desinfectarte de esa nostalgia que te recorre y te es necesario sonidos más precisos y eficientes, no hay duda que «Power & Volume» es el álbum ideal. Free Fall son consistentes de principio a fin, a través de rock’n’roll. Pero puede ser rock’n’roll y moderno a la vez? Claramente sí.

Vintages, auténticos, de otros tiempos… Los calificativos son muchos más o menos halagadores, pero creo que todo el mundo va a entender lo que son. Ellos son rock’n’roll hasta el final, no les pidas más, son libres como su nombre indica de esa forma espontánea en contar con gran parte de un público que reciben lo que quieren escuchar y punto. Admito que para muchos les será muy difícil de entender tanto anacronismo, para mí simplemente no, la música a mi forma de ver no entiende ni de lustros ni de décadas. Ellos nos gritan …The gasoline in my veins, in my brain, and the power and volume». Creo que todo está más que dicho.