Monster Magnet – Last Patrol (2013)

Monster Magnet son como un viaje de placer a través del cosmos, un viaje de más de 20 años en que Dave Wyndorf y compañía han sabido congeniar lo que es hacer buena música con su inconfundible stoner rock con la diversión. Una combinación de varios estilos en los que el blues, la psicodelia y el sonido espacial han incursionado en los últimos años. El esfuerzo realizado el pasado 2013 con su «Last Patrol» es una especie de resumen compacto de todo aquello de lo que la banda ha hecho hasta ahora, y ambos rinden homenaje a sus orígenes y al mismo tiempo cierran el circulo con una trilogía perfecta con («Dopes to Infinity», «Powertrip» y «Last Patrol»).

«Last Patrol» es una excelente liberación de todas las bases en las que se componen Monster Magnet. Inconfundibles sonidos iniciales de la banda con los dos primeros discos («Spine of God» y «Superjudge») altamente psicodélicos y espaciales, trasladándose más tarde y poco a poco en un territorio stoner mucho más blues y con un toque más de hard rock y alternativo («Powertrip»). Con «Last Patrol», vas a ser empujado demasiado lejos en cualquier dirección. Hay algunas canciones relajantes y melódicas «I Live Behind the Clouds», «Stay Tuned» y «One Dead Moon…, pero también contiene algunas cargadas de stoner acompañadas de groove, como la canción principal del álbum «Mindless Ones» y la enigmática «The Duke (of Supernature)». En todo caso, esta técnica ayuda a que la composición de «Last Patrol» sea mucho más completa y que las múltiples facetas eviten que sea un álbum mucho más predecible.

Acompañando inteligente una mezcla de sonidos en una cuidadosa atención a los detalles de producción. La mezcla es clara, nítida y audible en todos los ámbitos de la instrumentación. Toda la atmósfera del álbum tiene un ambiente muy que lo abarca todo, perfecto para escuchar con el acompañamiento de un buen «cigarro hippie», ya sabes… Sinceramente Dave Wyndorf me ha sorprendido gratamente ya que hacía muchos años que lo daba por muerto y enterrado, así que le hago un pulgar hacia arriba para un tipo de 56 años que ha luchado durante mucho tiempo con la adicción a las drogas. Por otro lado, el principal inconveniente del álbum es el hecho mismo de que no aporta nada nuevo a la mesa. Wyndorf y compañía no ofrecen algo nuevo a sus fans de siempre, ya que brindan un desempeño estrictamente dentro de su zona de confort. Esto lleva a la pregunta de si «Last Patrol» tendrá un valor de por vida significativo, pero por otro lado he llegado a un punto con Monster Magnet que no les pido nada nuevo después del descalabro que tuvieron con («God Says No») y la inclusión de algunos sonidos electrónicos. El álbum también incluye un par de canciones que podrían haber sido dejadas de lado. Me refiero concretamente a «Hallelujah», ya que rompe con la monotonía de un álbum de clara ascendencia.

«Last Patrol» es sinceramente más rock que metal, pero claro la línea entre el stoner rock y el stoner metal tiende a ser bastante delgada, voy a prescindir de las guerras de etiquetas y llegar al quid de la cuestión. Si has sido un fan de Monster Magnet hasta este álbum, seguramente serás bendecido por la onomatopeya de «wow». En cambio si eres vulgarmente hablando un «Noob» y acabas de oír hablar de esta banda, seguramente también quedarás prendado con la dicha onomatopeya. En general, «Last Patrol» en su conjunto muestra carácter y suena mejor cuando Monster Magnet deciden volver a sus raíces.