Dulce pájara de juventud – S/T (2012)

Para dulces pájaras de juventud, las que me solían agarrar en casi todos los conciertos a los que iba hace unos cuantos años. Y no, no es que ya no vaya a conciertos, es que ahora procuro ir cenado y aseado, y con esto que ya no se puede fumar en recintos cerrados (ni en el campo del Barça!), es mucho más difícil agarrarse un blancazo cannábico de esos que causaban estragos (y risas) entre mis amigotes. Una pena, porque con esas pájaras me podrían haber cogido para hacer de extra en una de las entregas de …œCrepúsculo… o de doble de cogote de Andrés Iniesta.

Dicho esto, hablemos un poco del nuevo fichaje de BCore, Dulce Pájara de Juventud, cuarteto dicen que llegado del extrarradio barcelonés (aunque no les veo lucir ni chándal, ni nikes air max de moro, es decir, las de los muelles, ni corte de pelo cenicero) y que, escuchado su álbum, podríamos decir que harán las delicias de los que crecimos -aunque poco- con todo la marabunta de rock alternativo que surgió en esa década de los 90, tan rara musicalmente ella.

Vamos, que Dulce Pájara de Juventud suenan a power pop, a college rock, a greña sudada, a camisa de franela, a Half foot outside (por no repetir los nombres que han salido a colación en casi todas las reseñas del LP), a sinceridad y euforia postadolescente -ruidosa y melancólica ella- a épica en minúsculas y a psiquedelia popera. Que me han gustado bastante, sí.