Destroy Boys – Open Mouth, Open Heart (2021)

Formados en 2015 por las dos chicas de la banda cuando tenían tan solo 15 años con la simple y llana intención de hacer punk, empezaron pronto a ganar notoriedad en la Bay Area. Entre sus hitos se encuentran abrir para bandas como Mannequin Pussy o Lagwagon, y participar este mismo año en el festival Aftershock. Pero en su debut con el sello californiano Hopeless Records, que les ha dado total libertad para experimentar, el trío expande su sonido a otros estilos más allá del punk rock, acercándose a menudo a la música alternativa de los noventa. Incluso se atreven con unos cuantos temas en español, un homenaje de Alexia (que es bilingüe) al origen latino de sus abuelos.

Se nota que es un disco meditado, bien trabajado, quizás fruto del confinamiento que los miembros del grupo pasaron juntos. Incluso hemos podido escuchar en directo las versiones en acústico que prepararon para su actuación en la Paste Magazine. La madurez también se nota en las letras, algo crípticas y a menudo mezclando ideas dentro de un mismo tema. Tratan de relaciones, las adicciones, la salud mental y las redes sociales, algo muy común tras la pandemia, a juzgar por los discos que hemos analizado recientemente (y no hay para menos).

La guitarra de Violet suena potente, original y certera. La voz de Alexia, natural y con un timbre muy personal. Viendo su evolución, su complicidad y su juventud, probablemente volvamos a hablar de ellas muy pronto.