Highly Suspect – The Boy Who Died Wolf (2016)

«The Boy Who Died Wolf», el segundo disco de los americanos Highly Suspect ha hecho que nos traguemos algunos de nuestros prejuicios. Listillos que somos, cuando vemos a un grupo que desconocemos nominado a un par de Grammys, enseguida pensamos que hay gato encerrado. Luego, esas pintas que gastan, ¿cómo nos vamos a sentir identificados con ellos? Pues mira, a pesar de la grimilla que dan, el disco les ha quedado resultón y eso es lo que importa.

No se puede estar en todo, por lo visto el primer single de su anterior y primer disco llegó al número 4 de las listas de rock en Estados Unidos, hecho que les abrió las puertas al denostado galardón (¿Beyoncé en la categoría de rock?). Y aunque todavía les falta un hervor, por lo escuchado, en este segundo trabajo han dado un paso firme hacia delante.

Los dos gemelos Meyer y su amigo Johnny Stevens se curtieron durante años haciendo versiones de rock antes de mudarse a Brooklyn y empezar a componer sus propios temas. Además, han girado con algunas de las bandas más importantes de rock y metal alternativo como Scott Weiland, Chevelle o Deftones. Es decir, saben lo que se traen entre manos, y eso se refleja en «The Boy Who Died Wolf», un disco de rock deslenguado de aires grungescos y apunkarrado, altamente radiable, moderno, variado y sólido tanto en la música como en la voz. Habrá que seguirles la pista.